#OrgulloArqDis
Catalina Villabona Triana
Con esta nota inauguramos una serie de entrevistas hechas a egresados de nuestra Facultad. La primera es de Natalia Ardila Torres, egresada del Departamento de Diseño y recientemente reclutada por Airbus.
ARQDIS: ¿Quién es Natalia Ardila Torres?
Natalia Ardila: Es una persona normal, común y corriente, a la que le gusta hacerse preguntas sobre muchos temas y construir cosas también.
“Little things console us, because little things afflict us.” Blaise Pascale
ARQDIS: ¿Qué estudiaste en la Universidad de los Andes?
N.A: Diseño, énfasis comunicación. Opción en lengua y cultura francesa. Hice seis meses de francés en la Alianza antes de entrar a la universidad. No sabía qué quería estudiar, así que decidí no comenzar hasta estar tranquila con la idea de empezar una carrera.
ARQDIS: En tu vida profesional tienes un claro enfoque en interacción, ¿recuerdas el momento que detonó esta pasión?
N.A: Inscribí Medios Interactivos porque el título sonaba interesante. Era mi séptimo semestre y me faltaba un Medio B (fui muy despalomada). Lo maravilloso fue que en este curso descubrí que programar y armar circuitos serían unas de mis mayores fascinaciones y frustraciones. Hacer virtualmente cualquier cosa es fascinante. El tiempo que implica programar y armar circuitos no garantiza que lo que diseñas funcione, lo cual es muchas veces frustrante. ¡Menos mal existen los foros!
Al principio me costó bastante, porque no solo es un proceso semejante al de aprender otro idioma, sino que también implica aprender otra lógica. Fragmentar el pensamiento en instrucciones, ser increíblemente atenta y paciente (un cable mal conectado daña todo).
Prender un led y darme cuenta que con algunas líneas de código podía tener un efecto en el mundo real
Una vez construido el medio, viene la alegría. Ver a la gente interactuar con lo que haces, es mágico. La interacción es en sí lo bello los medios permiten encauzar y dirigir esa interacción. Sin embargo, la experiencia que resulta de esta depende del diseño.
Un dispositivo bien diseñado logra una experiencia precisa, uno mal diseñado genera confusión y sensación de incomprensión.
“(…) every moment should be cherished as the precious and unlikely coincidence that it was.” Annie Druyan
ARQDIS: ¿Cómo llegaste a cursar tu maestría en Canadá?
N.A: Llegué buscando. Desde que cursé medios interactivos me enamoré. Me enamoré del hacer, de soldar, de buscar, de prender leds, de crear y quería un espacio para explorar eso. Antes de la maestría trabajé con Luisa Pinto como diseñadora UX en el área digital de El Tiempo y, a pesar de que me gustaba y me encantaba mi equipo de trabajo, quería algo más. Quería hacer dispositivos tangibles, investigar y aprender más de programación, de sensores y sobre todo de las posibilidades que ofrecen esas herramientas. Así que me fui a trabajar a Panoramika con Carlos Rodríguez; un pequeño estudio que se especializaba en experiencias interactivas.
El mundo de la publicidad es divertido al principio pero se vuelve extenuante rápidamente. No obstante, esa experiencia me sumergió más en el mundo del arte. Cada vez que buscábamos referentes para algún proyecto los artistas interactivos salían a relucir. El contacto que mantuve durante ese tiempo con la Universidad, sobre todo por mi implicación en los talleres de interacción tangible y con el Wiring Team, hizo posible que Hernando Barragán me hablara de la maestría y me contactara con Jaime Patarroyo. Para mí, en ese momento, tuvo todo el sentido irme hacer la maestría.
ARQDIS: Sabemos que en Canadá, además de estudiar tu maestría, trabajaste en Insertio, ¿Qué te llevó allá? ¿Qué desarrollaste en ese periodo? ¿Qué te aportó esta experiencia?
N.A: El trabajo como asistente de investigación iba de la mano con la maestría, por ello me vinculé a Insertio y con ellos realicé diversos proyectos durante mi formación. Los dos años en la maestría me permitieron desarrollar un amor y entendimiento profundo de mi proceso creativo, un mayor respeto por el arte y resiliencia a muchas cosas, especialmente al frío.
ARQDIS: Te felicitamos por tu ingreso a Airbus, es un logro muy importante para tu carrera. ¿Qué partes de tu formación fueron clave en el éxito de tu proceso laboral? Cuéntanos cómo fue este proceso, ¿Qué haces en Airbus?
N.A: De mi formación destaco a mis profesorxs y no ser diseñadora de (inserte cualquier palabra).
Mis profesorxs porque siempre que quise saber más, me respondieron y me mostraron el camino, siempre. Con libros, artículos, conversaciones, etc. Además, mantener la cercanía con la Universidad para mí fue y es fascinante, me permite ver cómo evoluciona la disciplina, la visión de la misma dentro de la Facultad y eso es clave. Son personas brillantes que no dejan de pensar en cuales son las posibles iteraciones y aplicaciones que puede tener el diseño ahora, a corto plazo y en más de 10 años y parten de la base de que además todo va a mutar por el camino. Esa proyección permite enmarcar el potencial y el valor del diseño y apropiarse de ello.
…y lo de “diseñadora de (inserte cualquier palabra)”, en la entrevista en Airbus fue un momento súper bonito:
— “Entonces eres diseñadora… ¿de qué?”
— Soy diseñadora a secas, en mi escuela no creemos en las especializaciones. Somos híbridos, capaces de adaptarnos al contexto y responder a las necesidades del proyecto.
— Ojos grandes y cabezas asintiendo, eso es oro.
Era lo que estaban buscando, querían alguien extremadamente flexible y resistente; un puente entre un mundo viejo, cuadriculado e increíblemente tecnocrático y el futuro que se empieza a dibujar, un mundo que aunque será primordialmente digital, mantendrá elementos de lo análogo.
Soy diseñadora a secas, en mi escuela no creemos en las especializaciones. Somos híbridos, capaces de adaptarnos al contexto y responder a las necesidades del proyecto
El proceso en Airbus fue igual que los otros. A las empresas a las que he llegado, he llegado buscando. Apliqué a varias ofertas por LinkedIn y un día de julio, después de muchos meses, recibí la invitación de entrevista en Toulouse para septiembre. Preparé un montón la entrevista, leí sobre la empresa, el cargo, todo. It worked.
En Airbus hago parte del equipo UxiD que es transversal a varias entidades. Trabajo con el equipo de ingeniería, en operaciones de cabina de pilotos y también con el del Acelerador Digital, entidad que está impulsando nuevas prácticas y una migración hacia servicios y productos digitales. Desde mi departamento apoyo la adopción de metodologías de diseño, mostrándole a lxs ingenierxs métodos que permitan prototipar, validar e iterar con mayor agilidad, pequeños prototipos con Arduino y demás. El camino no es evidente, sobretodo en el campo de la ingeniería, en dónde el único conocimiento legítimo es aquel vinculado a la aviónica. Pero la compañía le está apostando fuertemente a nuevas competencias. La idea es que de aquí a un año (fingers-crossed) todos los proyectos sean acompañados por un diseñador, al menos en la fase inicial, para asegurar el desarrollo del producto y agilizar el proceso.
ARQDIS: Recomiéndanos un libro, un disco, una película y una cuenta de instagram
N.A: Libros: Sobre ser humano: Gardens: An essay on the human condition de Robert Pogue Harrison, Sobre diseñar: Interface de Brandon Hookway y Sobre la vida: The Pleasure of Finding Things Out de Richard Feynman.
«Un disco» – ¿qué es eso?
Canciones que amo: muchas, distintas todas.
Mejor recomiendo tener unx amigx que los ame y les muestre música. Sí además les hace playlists atesórenlx y no dejen de profesarle su amor, no hay muchxs así.
Película: Mr. Nobody — Jaco van Dormael
IG : @stopspendingsomuchtimeonyourphone @selfiesarereallynotthatinteresting
mentira, jiji
ARQDIS: ¿Quién es tu diseñador favorito?
N.A: También podría ser: ¿Quién es mi diseñadora favorita?
Pero no hay unx únicx favoritx, esa es la belleza del diseño (y de la vida, para mí): la pluralidad. Habiendo dicho eso, el trabajo de Shannon Mattern es increíblemente interesante y pertinente. El de Mads Høbye es ensoñador en toda la definición, es visionario, imaginativo, iluso, idealista, y a veces abstraído de su contexto, pero a través de la teoría logra hilarlo todo y mostrar su riqueza, lo cual, es admirable. Su tesis doctoral me hizo muy feliz. Por último, el trabajo que está haciendo la escuela de diseño de Stanford respecto a los talleres de tecnologías emergentes es clave hoy en día.
ARQDIS: Para terminar, ¿Qué le dirías a alguien que quiere estudiar diseño en la Universidad de los Andes?
N.A: Que espero que sean más inteligentes que yo y que escojan sus cursos con la intención clara de experimentar y buscar lo que les llena en la vida, aunque a esa edad es difícil saber lo que uno quiere y eso está bien también.
No creo que llegue un momento mágico en el que uno sabe lo que quiere. La felicidad pasa y uno no se da cuenta de lo feliz que fue
Que fallar hace parte de todos los procesos, sobretodo el de aprender quién es uno.
Que nada determina nada (esto es bueno y malo). Nada impide que uno empiece cosas nuevas, cosas que parecieran no tener vínculos entre ellas. Lo importante es cómo uno hila la trama.
Que sean ingenuos de la manera en que Didi-Huberman lo describe. Es una ingenuidad que no tiene nada que ver con la simplificación de las cosas. Se trata entonces de confiar, de tener una postura abierta frente a la voluptuosa complejidad que ofrece el diseño y el programa en sí. Es el gesto de aceptar de una manera interrogativa tal complejidad, el placer de querer jugar con ella.
