El viaje de Estudio, estuvo directamente vinculado con el Estudio de Maestría “Diseño para el Juego”. El objetivo de este curso fue incentivar a los estudiantes en el estudio y diseño de experiencias lúdicas, pensando y construyendo en torno al derecho al juego, las virtudes de la fantasía y el potencial de involucrar a las infancias en el proceso de diseño. En esta oportunidad, se contó con la participación de estudiantes y profesoras de la maestría Design for Play, de Design School Kolding (Dinamarca) y estudiantes de la Maestría en Diseño de la Facultad de Arquitectura y Diseño de la Universidad de los Andes. Las dos universidades, en un esfuerzo conjunto, diseñaron el viaje de estudio a Marsella, Risaralda, en donde se trabajó junto a infancias rurales en la ideación y prototipado de experiencias para el juego, teniendo en cuenta metodologías participativas y de co-creación en un contexto completamente distinto a los explorados por Kolding y Uniandes previamente en sus respectivas ciudades. El curso tuvo una duración de dos semanas, la primera en Bogotá destinada a la planeación e intercambio metodológico. La segunda en Marsella, donde los estudiantes llevaron sus ideas de juegos o juguetes para prototipar con los niños de las cuatro escuelas del lugar, una en el casco urbano y tres ubicadas en zona rural: La Inmaculada, Manga Bonita, Pauji y La Palma. Espacios, en que los estudiantes tuvieron contacto con alrededor de 60 niños.
El viaje se enfocó en el intercambio de experiencias pedagógicas con la motivación de diseñar para y con la niñez, teniendo en mente que las infancias son múltiples, diversas, absolutamente reveladoras y se ubican más allá del norte y más allá de lo urbano. La aproximación estuvo nutrida por Child Centered Design (Karen Fader, Dinamarca) y constó de tres etapas: Internship as a Child (Práctica como niños) , donde los estudiantes se relacionaron con los niños a través del juego, Co-creating the life of a child (Co-creando la vida de los niños), donde los estudiantes establecieron diálogos creativos con los niños para formular insights provenientes de sus vidas y por último, Comparing a child persona (Comparando infancias), donde los estudiantes confrontaron su pensamiento hacia la creación de nuevos significados para el diseño de juegos o juguetes.
En cuanto al estudio de la maestría “Diseño para el juego”, se trabajó con el pensamiento de diseño que en este caso partió del estudio de la Fantasía. Esta metodología estuvo dividida en tres etapas: Despertar del niño interior, en donde se realizó la actividad de reconocer al niño que nos habita. Fantasías colectivas, en qué se construyó una nueva fantasía, la cual fue el insumo para empezar a diseñar y Proyecto de Diseño para el juego; etapa en la que nacieron ideas, se desarrollaron y se puso a prueba un proyecto colectivo en torno al juego. Ambas metodologías permitieron una perspectiva ampliada y diversa sobre el caso de estudio, dejando como aprendizaje el potencial del juego como un lenguaje universal.
Aliados en la región
Lucida Mejía, colegio La Inmaculada.
Diana Isabel Arias, sede el Paujil.
Carmen Liliana Duque Fernández, sede La Palma.
Myriam Cristina Zuleta Betancur, sede Mangabonita.
Leonardo Pinzón, rector del circuito escolar de Marsella, Risaralda.
Instituto Agrícola Alto Cauca.
Aliados internacionales
Karen Fader, Maestría en diseño para el juego DKSK
Louise Aagaard, Maestría en diseño para el juego DKSK
Camilo Rodríguez, gestor de alianza entre Uniandes y DKSK.