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Catalina Villabona Triana
El pasado 18 de noviembre de 2021 se celebró la premiación del Concurso académico Ideas para un Hábitat productivo y de calidad. Propuestas para la vivienda social. El encuentro reunió a estudiantes y profesores de las siete universidades participantes. Los resultados correspondientes a los tres ámbitos de trabajo propuestos por el concurso anunciaron como ganadoras dos propuestas planteadas por estudiantes del Departamento de Arquitectura. El premio ofrecido al tercer ámbito, Fusagasugá (Cundinamarca), fue declarado desierto.
Las propuestas ganadoras: Integridad MultiEscalar de Álvaro José Moreno Agudelo y Juan Sebastián Bautista González (ámbito Caparrapí) y Entre-Lazos de Daniel Villacis Coral y Mateo Arcos Tamayo (ámbito San Cristóbal), fueron desarrolladas en la Unidad Intermedia Innovación y Vivienda impartida por los profesores: Alberto Miani y David Delgado (componente de proyecto), Diego Rubio (curso de análisis) y Erik Vergel (enfoque teórico).
El juzgamiento del concurso tuvo lugar el 9 de noviembre de 2021 en la Universidad de los Andes y reunió a los seis (6) jurados encargados de evaluar las dieciocho (18) propuestas seleccionadas para la ronda final de juzgamiento: Fernando Cortes Larreamendy, Presidente del Jurado (Universidad Nacional de Colombia), Diana Mora (Universidad Piloto de Colombia), Camilo Hernández (Universidad del Bosque), Ángelo Páez (Universidad Católica de Colombia), Miguel Ulloa (Universidad América) y Helmuth Ramos (Universidad de la Salle). A esta sesión se unió Catalina Mahe, asesora en calidad del hábitat. Esta selección de 18 proyectos fue producto de un proceso de valoración en el que, de manera individual, los jurados ponderaron veintinueve (29) propuestas de acuerdo con los criterios establecidos por los organizadores del concurso.
Integridad MultiEscalar
Integridad MultiEscalar es el título del proyecto ganador del Ámbito 1: Zona rural de Caparrapí, Cundinamarca, desarrollado por los estudiantes Álvaro José Moreno Agudelo y Juan Sebastián Bautista González. La propuesta parte de la pregunta ¿es posible pensar en construir un vecindario productivo en Caparrapí, con vivienda rural dispersa, espacios que soporten la productividad individual y los procesos colectivos? A partir de este cuestionamiento el proyecto busca generar un equilibrio en los modos de vida que devienen de la actividad panelera. Para ello parte de un enfoque territorial que llega hasta el núcleo de la unidad de vivienda.
En Caparrapí la producción panelera se establece como el principal medio de sustento de la población, el 89% del suelo es destinado a la siembra de caña. Espacios como la enramada y actividades como el apronte de la caña, se convierten en elementos que reúnen a la comunidad en torno a la actividad de producir. Sin embargo, la dinámica existente cuenta con diversas dificultades: la desnaturalización del territorio; una cultura que condiciona a la mujer a actividades domésticas y ofrece pocas alternativas para los jóvenes; déficit de espacios distintos al de trabajo y una cadena productiva inconclusa que depende de Villeta para el empaque y comercialización del producto.
A partir de esta lectura del territorio, el proyecto busca integrar el contexto ambiental, social y económico con el fin de generar una productividad integral y brindar nuevas oportunidades. El tema ambiental se resuelve mediante el desarrollo de corredores ecológicos que conectan y fortalecen la estructura actual a la par que restauran paulatinamente las determinantes ambientales existentes. A esta capa se adicionan unos nodos que complementan la cadena existente por medio de espacios como el centro de empaque, centro de innovación, plaza de intercambio, cocina de leña comunitaria, zonas de estudio, salones polivalentes y zonas de bienestar que acompañan el recorrido.
En cuanto al aspecto económico los jurados anotan que “el proyecto presenta un modelo de gestión que desarrolla la cadena productiva y aborda los procesos de producción, empaque, procesamiento y comercialización, así como el aprovechamiento de insumos y derivados para su uso posterior en otros procesos como, por ejemplo, el desarrollo de ladrillos ecológicos a partir del uso de fibras y derivados.” En esta línea también destacan “el planteamiento y la implementación de los centros de innovación que permiten no solo una mejora en el proceso de producción sino, a su vez, la especialización e investigación por parte de la población, así como espacios multipropósito que permiten desarrollar formas alternativas de producción.” En cuanto al ámbito social el proyecto propone espacios de encuentro de escala central y vecinal y vincula a la mujer a la cadena productiva.
En relación con la vivienda, el proyecto plantea un modelo flexible, modulado, productivo y sostenible, concebido en materiales propios de la región como guadua, esterilla de caña, madera y el residuo de la actividad panelera.
Te invitamos a conoce las planchas que presentaron al concurso.
Entre-Lazos
Daniel Villacis Coral y Mateo Arcos Tamayo desarrollaron Entre-Lazos: conectar en el suelo lo que se conecta por el aire, el proyecto ganador del Ámbito 3, Localidad de San Cristóbal, Bogotá. Esta propuesta que se ancla a la estrategia del Sistema Distrital de Cuidado, impulsada por la Alcaldía de Bogotá, que busca que los habitantes de la ciudad encuentren equipamientos, centros de salud, comercio, espacio de recreación y de cultura a una distancia caminable de no más de 15 minutos desde su vivienda.
A partir de este planteamiento y de un análisis del lugar que identificó que los nodos de actividad existentes en San Cristóbal se encuentran dispersos por el territorio y que la comunidad residente no cuenta con estos soportes a menos de 300 metros, el proyecto propone mejorar la accesibilidad a estos servicios través del entrelazamiento de múltiples capas a nivel de la ciudad, el barrio y la vivienda. Lo anterior, por medio del desarrollo de un modelo de gestión productivo e integral del espacio que complemente el Sistema Distrital del Cuidado.
La propuesta busca enlazar varios sistemas: uno de espacio público que vincule los nodos identificados; uno de vivienda que incluye la creación de espacios que le den soporte al hábitat integral y productivo y finalmente uno de intervenciones puntuales que activan predios con bajo nivel de consolidación (acupuntura urbana). En palabras de los jurados, la propuesta es un “vecindario productivo en una porción más amplia del territorio que reconoce las características y la escala barrial y que construye una pieza de ciudad”.
En relación con la vivienda, el proyecto propone unidades diversas y flexibles que se adaptan a cada tipo de familia y que proveen áreas verdes internas que refuerzan la idea de productividad. Según los jurados “la vivienda que se plantea permite que los habitantes la interpreten, construyan y desarrollen en el tiempo, dentro de un concepto de vivienda productiva”.
Te invitamos a conocer las planchas que presentaron al concurso.