El curso plantea la interacción entre dos disciplinas: el Diseño y la Arquitectura. Se basa en un enfoque exploratorio para la conceptualización configuración, elaboración y la resolución de espacios interiores a través de
la creación de una atmósfera espacial, basada en el diseño de la experiencia.
La atmósfera espacial se entiende como una experiencia elaborada de muchos sentidos. En ella el lenguaje aplicado a la materialidad, la luz temperatura, el color y el sonido son considerados como elementos valiosos del diseño. Se introducen las lógicas y tradiciones de estos elementos y se fomenta el desarrollo y la investigación de nuevas intervenciones a través de experimentos en el Studio-workshop. El área principal de interés en el diseño-arquitectura de interiores es la interacción de los espacios y los elementos que lo componen. Estos se entienden no sólo en términos de sus propiedades funcionales, sino también como una unidad básica multidimensional capaz de proporcionar experiencias sensoriales, combinando la tradición de diseño con nuevas formas de expresión y el entorno compuesto por los objetos diseñados para producir en conjunto un espacio con un lenguaje conceptualmente contundente y comunicacionalmente efectivo. En particular, las propiedades que dan forma a la identidad de dicho espacio se dan a través de la intervención mediante elementos coherentes, tanto al origen como al propósito del lugar, que incorporen los ejes comunicacionales del mismo. Así la manera de articular la fusión del espacio y un concepto mediante su materialización son los temas centrales del curso.
El énfasis principal del curso estará en la creación de las dimensiones atmosféricas de un espacio. Obtendremos una comprensión más completa de cada una de estas dimensiones esenciales de un diseño arquitectónico, a través de cuatro etapas de desarrollo: conceptualización, formalización, materialización, detallado, adecuación y diseño final. Se espera generar en los estudiantes un interés continuo, una gran curiosidad y un sentido compartido del asombro mediante un proceso creativo informado y analítico.
Los estudiantes deben trabajar principalmente en tareas de diseño concreto, desarrollando una visión personal en conjunto con las habilidades técnicas básicas en su campo. Asimismo, los estudiantes desarrollarán procesos de diseño a través del conocimiento de lenguaje, materiales, habilidades de composición en 3D y entender las relaciones espaciales entre las personas y los objetos-productos, es decir, la experiencia humana, cuerpo y sentidos como base de la arquitectura interior. Finalmente, el curso tiene como objetivo que los estudiantes entiendan un espacio específico existente como una oportunidad de diseño. De modo que, mediante una intervención en tal espacio, tendrán en claro a través de un análisis, las dinámicas del entorno y las particularidades tanto arquitectónicas como históricas del lugar. Esto con el propósito de tener herramientas conceptuales para crear una propuesta que sea coherente con tales factores, lo que se quiere diseñar, y a su vez los conteste mediante la elaboración de un lenguaje, con un concepto contundente, que de cuenta de una atmósfera que lo comunique. Diseñando así un espacio que integre a su habitante en un imaginario que lo transporte a través de los sentidos a una
infinidad de situaciones.