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Gregorio Castro Albornoz
Anoche, 25 de noviembre de 2020, se celebró la vigésimo séptima Bienal Colombiana de Arquitectura y Urbanismo (BICAU XXVII), la más antigua del continente. En esta, como en otras ocasiones, los estudiantes, profesores y egresados del Departamento de Arquitectura de la Universidad de los Andes se vieron ampliamente representados. La participación de la comunidad uniandina en el evento en general se caracterizó por proponer una arquitectura abierta, respetuosa del paisaje, y consciente de la necesidad y la capacidad de la arquitectura de producir en Colombia una sociedad más amable y equitativa.
Proyecto arquitectónico
El Premio Nacional de Arquitectura lo obtuvo el edificio Centro Cultural del Japón, localizado en la Universidad de los Andes y diseñado por los arquitectos Álvaro Bohórquez Rivero y Maribel Moreno Cantillo. Este proyecto además fue galardonado con el premio Fernando Martínez Sanabria, Categoría “Proyecto arquitectónico”.
En esta misma categoría el edificio 8111 diseñado por el egresado Daniel Bonilla (Taller de Arquitectura de Bogotá) se llevó una mención. Este edificio además contó con el diseño estructural del profesor del Departamento de Arquitectura Nicolás Parra.
Diseño urbano y paisajismo
El premio Karl Brunner de la categoría “Diseño urbano y paisajismo” se lo llevó la oficina Diseños y concepto, a cargo de Ricardo Vives Guerra, egresado de la Facultad de Arquitectura con el proyecto Gran Malecón del Río, unidad funcional 1 y 2. El proyecto le apuesta a recuperar la mirada de Barranquilla sobre el río Magdalena. El urbanismo en Colombia ha tendido muchas veces a darle la espalda al agua, ocultándola bajo tierra o canalizándola. La propuesta de Vives es recuperar la conexión de la ciudad con el río para producir un espacio amplio y fluido que democratiza y promueve la mirada sobre el río e invita al paseante a dejarse acompañar del Magdalena.
Ordenamiento urbano y regional
El premio Leopoldo Rother de la categoría “Ordenamiento Urbano y regional” lo obtuvo el Plan Maestro para la Estación Intermodal de la Estrella del Metro de Medellín, en el que participó la profesora Giovana Vittoria Spera.
Vivienda unifamiliar, bifamiliar o trifamiliar
El premio Ricardo González Ripoll, categoría “Vivienda unifamiliar, bifamiliar o trifamiliar” fue para Casa Tejida, una colaboración de Santiago Pradilla, profesor de la Facultad, y la oficina Zuloark (Juan Chacón). El proyecto es una casa de madera en las lomas escarpadas de Nocaima, Cundinamarca, que busca integrarse con el paisaje sin agredirlo. De hecho, el paisaje representa la puesta en escena del matrimonio entre la luz y la madera. La casa reivindica y le hace sitio a los atardeceres de la montaña y se deja abrazar por la luz. Las vigas que la sostienen son un homenaje a la arquitectura popular que se hace en nuestras montañas y desafían con descaro la ley de la gravedad. Esta es una arquitectura que en vez de marcar rígidamente un “afuera” y un “adentro” busca cuestionar esas fronteras y dejarse atravesar por la luz y el aire. Es de resaltar además el compromiso social del proyecto puesto que la selección de medios y materiales fue curada específicamente con la intención de vincular la mayor cantidad de personas de la vereda en la construcción.
Arquitectura efímera y de interiores
Los proyectos Casa Volcanes (AR-AR Martinez Arquitectura, Carlos Martínez, egresado + Fiallo Atelier) y Casa del curandero (“Oberlaender Arquitectos”, Lucas Oberlaender, egresado y profesor) fueron condecorados con menciones individuales, así como las Oficinas Grupo Meiko del estudio “We are size”, liderado por el egresado René Daniels, en la categoría: Arquitectura Efímera y de Interiores.
Intervención de patrimonio
El premio Carlos Arbeláez Camacho, categoría “Intervención de patrimonio” fue para la propuesta de Fragmentos – Contramonumento (“Granada Garcés Arquitectos, Carlos Granada, egresado). En un país fracturado por la guerra como es Colombia son necesarios los arquitectos como Granada que se preocupan por el lugar de la arquitectura en la historia, por la necesidad de crear espacios que generen memoria y sanen las heridas sin buscar ocultarlas. En estos años en que las estatuas de los héroes parecieran caer con tanta facilidad, la propuesta del Contra monumento es incomodar y sugerir preguntas. El piso, hecho con los fusiles fundidos de la guerrilla, cuestiona al espectador acerca del espacio que tienen en Colombia el dolor, la vergüenza y el peso de la historia, pero también la paz, la memoria, el perdón y la dignidad. El Contra monumento se niega a ocultar la historia sangrienta de Colombia detrás de héroes ornamentales y huecos y nos pone frente a la superficie liza, negra e impenetrable que no nos ofrece otra respuesta más que el silencio y nuestro reflejo.
Publicaciones
La Universidad también tuvo presencia en los reconocimientos a publicaciones. El premio David Eduardo Serna, categoría “Divulgaciones” se lo llevo el Sello editorial IDPC, bajo la dirección editorial de Mauricio Uribe (egresado). También fueron laudadas en esta categoría la revista Dearq del Departamento de Arquitectura, gestionada por el equipo compuesto por: Juan Pablo Ascher (director 2012-2019), Camilo Salazar (director), Lucas Ariza (editor), Juliana Pinto (gestora editorial) y Melissa Ferro (gestora editorial), y la Colección de tesis de posgrado que agrupa investigaciones desarrolladas en la Maestría en Arquitectura. En este caso se trata de las tesis de Steffano Anzellini (profesor) “Guía para una arquitectura de apropiación”, Lucas Ariza Parado (profesor) “El temple de la arquitectura”, Manuel Saga (egresado) “Granada Desgranada” y Alfonso Arango Gonzales (egresado) “El trazo del horizonte” .
De igual modo, las investigaciones Rogelio Salmona: Un arquitecto frente a la historia (Cristina Albornoz, profesora) e Hijos de la Rue de Sevres: Los colaboradores latinoamericanos de Le Corbusier en París (Ingrid Quintana Moreno, profesora) fueron laudadas con menciones en la categoría “Investigación, Teoría y crítica”.
Bienal de estudiantes
Por último, transversal a la BICU XXVII se celebró también la Cuarta Bienal de Estudiantes de Arquitectura, en la que fueron galardonadas en la categoría “Diseño Urbano Rural y Planificación del Territorio” nuestras estudiantes Laura Triviño Canisalez y María Camila Martínez González con sus proyectos de grado. Laura se llevo el segundo lugar con el proyecto Del trazado rural al barrio formal, dirigido por los profesores Daniel Bermúdez Samper y Lucas Ariza Parrado. María Camila el tercero con el proyecto Calle-escenario (suma de acciones en el Alto Fucha), dirigido por los profesores Juan Manuel Medina del Rio y Carolina Concha.
