Pareciera que el vestir cumple con un deber ser y hacer, o hacerse. Su deber ser, por ejemplo, demanda cumplir códigos culturales para pertenecer a ciertos círculos sociales: marcas, colores, largo de la falda. Y para hacer caso a su deber hacer, se ha decretado que un utensilio infaltable en la confección es el maniquí de proporciones corporales predeterminadas.
Con el desvestir y el malvestir invitamos a quienes tomen este estudio a cuestionar procesos de diseño tradicionales que colaboran a mantener esos deberes en el vestir. En este estudio proponemos experimentar con las herramientas, habilidades y saberes que han cultivado hasta el momento en su carrera, para explorar potenciales creativos que nos lleven a caminos propios.
En cuanto a la metodología, este curso contará con un componente individual de creación que luego exhibido en colectivo en para provocar reflexiones en audiencias externas a la universidad.
Este estudio se realiza en colaboración con el Espacio Cultural Proyecto Binario.